Me pierdo otra vez en las calles manchadas de vos.
En alguna tarde de invierno, con nuestras manos en mis bolsillos frios.
Sentado, miro como aviones de papel marcan el cielo dejando escapar una gota de realidad, entonces me despierto.
Un sonido que alguna vez significo que era el momento exacto para amar, hoy solo se vuelve mensajero de malas noticias, y los ojos llenos de lagañas, me impiden verte tratando de respirar.
Tomo el primer tren, ese que parte de la estación de las Hojas Rojas, dejandome arrastrar hacia días de toboganes y subibajas, para darme cuenta de que todo eso quedo atras, como el viento despeinando mi pelo junto a la ventana.
Un reloj marca los corazones rotos.
Ya van mas de 24 horas.
Una telaraña en un rincon me recuerda de esos miedos que superamos juntos, y un pequeño gato, a esas noches sin dormir.
Tomo mis cosas, abandono ese asiento que impregne con olor a nostalgia, bajo y siento la presión de mirarte pasar, invisible, entre columnas de hierro.
Un espacio de mi mente aún sigue lleno de todas esas cosas que alguna vez hicimos juntos justo donde hoy mis pasos se repiten.
Y llego otra vez a mi casa, para descoser mi bufanda, esperando poder reconstruirla algun dia con los suaves hilos de tu oscuro pelo.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
No comments:
Post a Comment